¿Quién no ha admirado el
diseño de alfombras orientales combinado con un
mobiliario moderno y elegante? El contraste entre lo antiguo y lo moderno, lo tradicional y lo contemporáneo, son factores que atrapan a más de uno, provocando una “sacudida” visual que simplemente no existiría en una
habitación elegante y moderna si esta carece de una alfombra en su piso.
Además de los elementos de diseño en el patrón, la textura y el color,
una alfombra oriental puede proporcionar a una sala moderna la sensación de profundidad e historia. Pero lamentablemente no todas las alfombras orientales se incorporan bien a los ambientes modernos. Afortunadamente existen algunos trucos que pueden ser utilizados para escoger el tipo correcto de alfombra:
Hay docenas de
tipos de alfombras orientales por ahí, pero las que parecen combinar mejor en una
habitación moderna son las del tipo tribal, como las
alfombras persas Hamedan o las Shiraz, que cuentan con audaces diseños geométricos y colores.
Las
alfombras de colores brillantes pueden verse particularmente fabulosas en entornos modernos, donde haya líneas limpias y menos desorden. Estas alfombras llegarán a ocupar un lugar central como elemento de diseño en la sala. Es una opción sencilla y colorida de decoración.
Las alfombras orientales parecen incorporarse muy bien con las paredes que contengan
obras de arte. Puedes buscar una alfombra que complemente estas obras, en lugar de competir con ellas. Si tienes una obra atrevida y exuberante, es posible buscar una alfombra más bien simple, y con poco contraste en su patrón.
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